MILITARISMO:SITUACIÓN DEL PERÚ AL FINALIZAR LAS GUERRAS POR LA INDEPENDENCIA


REPÚBLICA: PRIMER MILITARISMO:SITUACIÓN DEL PERÚ AL FINALIZAR LAS GUERRAS POR LA INDEPENDENCIA, ASPECTOS (CRONOLOGÍA,CAUSAS,ANTECEDENTES)

I. SITUACIÓN DEL PERÚ AL FINALIZAR LAS GUERRAS POR LA INDEPENDENCIA.


Al concluir las guerras por la Independencia, la situación en que se hallaba el naciente Estado peruano era calamitoso. La economía estaba en franca decadencia como resultado de tantos años de campaña militar. El aparato productivo estaba paralizado como consecuencia de las devastadoras incursiones militares, lo cual, originó una grave parálisis en nuestra agricultura, minería y comercio. La crisis económica repercutía directamente sobre la sociedad peruana, siendo los sectores populares (indios, mestizos, negros) los que recibían el impacto con mayor dureza.
El advenimiento del naciente Estado republicano, constituido formalmente bajo los esquemas ideológicos demoliberales burgueses de la revolución americana y francesa, debió traer consigo un cambio sustancial de las estructuras estamentales de diferenciación social imperantes durante el coloniaje. Este cambio se debió manifestar en un mejoramiento sustantivo de las condiciones de vida del indio, el negro y los sectores excluidos; sin embargo, la realidad nos demuestra que por el contrario, las diferencias se agudizaron y el Estado se convirtió en un instrumento coercitivo al servicio de las cúpulas oligárquicas, que, desde el poder, usufructuaron en desmedro de las masas.
Respecto al ordenamiento jurídico legal que iba servir de base al funcionamiento del naciente Estado, se debe señalar que fue la Constitución liberal de 1823 el instrumento legal que garantizó el desenvolvimiento inicial de la nuestra recién fundad República.
La determinación territorial de los nacientes Estados Republicanos en Hispanoamérica fue solucionada en virtud de la aplicación de dos principios jurídicos:

1. El Uti Possidetis de 1810 y,
2. La Libre Determinación de los Pueblos

Según el primero, cada país tendría derecho a una soberanía territorial, conforme al territorio que había poseído como territorio colonial hacia 1810. El segundo principio jurídico señalaba que los pueblos, en aplicación de los principios de soberanía popular podían decidir espontánea y libremente a que nación pertenecer. Según esto, si un pueblo por Uti Possidettis pertenecía a un país, pero decidía por libre determinación pasar a otro, entonces el primer principio quedaba sin efecto y el pueblo pasaba a pertenecer al otro país. Ejemplo es esto es el caso de Jaén, que por Uti Possidettis pertenecía legítimamente a La Gran Colombia, pero al decidir por Libre determinación pertenecer al Perú, pasó legítimamente a ser parte de nuestra soberanía, eligiendo incluso sus representantes para nuestro Congreso Constituyente de 1822.

II. ASPECTOS BÁSICOS.


1. DEFINICIÓN: Periodo de nuestra historia republicana en la cual los caudillos militares tomaron el control absoluto del Estado peruano.

2. CRONOLOGÍA:


3. DENOMINACIÓN: El término Primer Militarismo es acuñado por el ilustre historiador tacneño Jorge Basadre Grohman. Este identifica a lo largo de nuestra historia republicana la existencia de 3 militarismos, los cuales son:

a. Primer Militarismo o Militarismo de la Victoria: 1827 – 1872
b. Segundo Militarismo o Militarismo de la Derrota: 1883 – 1895
c. Tercer Militarismo: 1930 – 1980

4. CAUSAS:
- El caudillaje de los primeros años de la República surge como consecuencia de la falta de una clase civil orgánica, la carencia de una burguesía emprendedora y con objetivos políticos precisos y definidos.
- El prestigio obtenido por los Caudillos de la Independencia, conocidos como los “Mariscales de Ayacucho”, luego de concluida las guerras por la independencia.
- La incapacidad de los criollos civiles de garantizar la estabilidad y el orden interno y externo de la incipiente república.
- La necesidad de imponer el principio de autoridad frente al peligro que representaban los montoneros o guerrilleros indios para los intereses de las clases dominantes.

5. ANTECEDENTES: 
Terminadas las Guerras por la independencia y alejado el peligro que representaba España, quedaba la tarea de consolidar el naciente Estado Peruano. Sellada nuestra independencia con la firma de la Capitulación de Ayacucho (Diciembre de 1824), Bolívar prolongó sus poderes dictatoriales en nuestro país, aspirando a instituir su anhelada “Dictadura Vitalicia”, hecho que quedó demostrado cuando contra todo sentido de racionalidad encomendó al Mariscal Sucre la creación de una nueva República, sobre territorios que históricamente habían sido peruanos, esto es el Alto Perú. Así, en 1825 Sucre crea la República de Bolivia y redacta la Constitución Vitalilcia, como instrumento jurídico para perpetuarse en el Poder. Es aprobada en el Perú, aunque días después es derogada, dada la tenaz oposición política de los sectores liberales nacionalistas que presionan a Bolívar a dejar el mando y abandone el país. Es en ese contexto que, en junio de 1826, las pretensiones autoritarias y vitalicias de Bolívar llegan a su máxima expresión, convocando al Congreso de Panamá, con el propósito de establecer una “Confederación Hispanoamericana”, es decir, la reunión de todas las nacientes repúblicas hispanoamericanas desde el Mississipi hasta el Cabo de Hornos, obviamente, bajo la hegemonía bolivariana. Este proyecto fracasa debido a los recelos de las burguesías locales de cada una de las mencionadas naciones, renuentes a aceptar someterse al dictador venezolano. En un último intento lograr sus anhelos federativos, Bolívar plantea la creación de la “Federación de los Andes”, consistente en la reunión de los Estados por él liberados, en ese momento representado por: La Gran Colombia, Perú y la recientemente fundada Bolivia. Este ensayo federalista tampoco tuvo éxito debido las reacciones opositoras de cada uno de esos países. Viendo que sus planes autoritarios se ven frustrados, y acorralado por la férrea oposición liberal en el Perú, opta por abandonar el país en septiembre de 1826, zarpando del Callao con destino a La Gran Colombia, dejando encargado del Consejo de Gobierno al General Andrés de Santa Cruz, personaje que también poseía ambiciones y pretensiones autoritarias. Santa Cruz convoca a un Congreso Constituyente y a elecciones para 1827, presentando su candidatura frente a la de su oponente el General José de La Mar. El Congreso de la República, mayoritariamente liberal, y por tanto, adversario político de Santa Cruz, le entrega el poder al General José de La Mar, dado que éste no representaba ninguna amenaza para sus intereses, sino que por el contrario, sería un dócil instrumento para la consecución de sus objetivos. De esta manera es que se instaura en el Perú el Primer Militarismo, un periodo de caudillismo signado por la inestabilidad, el interés mezquino de los sectores dominantes y de oportunidades perdidas en desmedro del Perú.